Olivar no es una inmobiliaria de lujo: es una obra de arte habitable. El nuevo proyecto de Alfonso Cobo redefine la forma en que vivimos, creamos y nos conectamos a través del diseño, con cinco propiedades singulares cuidadosamente concebidas en Nueva York, Los Ángeles, Madrid, Ubud y Bellport

Un olivo, cinco hogares y una visión. Así podría resumirse Olivar, el proyecto más íntimo y ambicioso de Alfonso Cobo. Más que una red de propiedades para estancias, shootings o eventos, Olivar es una colección curada de espacios donde el diseño se convierte en vehículo de emoción, calma y belleza. Las casas —ubicadas en Tribeca (Nueva York), Bellport (Long Island), Calle Mayor (Madrid), Hollywood Hills (Los Ángeles) y Ubud (Bali)— son enclaves cuidadosamente seleccionados donde la estética japonesa se mezcla con la calidez escandinava en un estilo Japandi que habla de armonía, sutileza y sofisticación.

Nacido en Gran Canaria, criado en Madrid y con raíces andaluzas profundamente marcadas, Cobo ha logrado plasmar en estas cinco residencias no solo su evolución y amor hacia el interiorismo, sino su identidad como creador global con alma mediterránea.

La firma visual y conceptual es inconfundible. Techos de más de seis metros y terrazas que desafían el cieno en Tribeca hasta piscinas que olvidan los límites entre interior y exterior en Ubud. Ventanales que permiten que la luz lo inunde todo, cocinas y sofás hechos a medida, librerías de acero, jardines íntimos… Cada espacio es una experiencia viva diseñado por Alfonso en colaboración con estudios de arquitectura de renombre como OOAA. No hay improvisación: todo responde a una visión donde el diseño no adorna, sino que transforma.

Alfonso Cobo. Arquitecto formado en Brighton y más tarde en Parsons (Nueva York), se mueve entre disciplinas como el diseño de apps, la música, la hospitalidad y el branding emocional. En cada proyecto, su objetivo es el mismo: emocionar, simplificar y conectar. Olivar es la expresión tangible de esa filosofía. Desde su actual base en Los Ángeles, Cobo continúa desarrollando iniciativas como Hypelist, una herramienta digital que también nace de una necesidad emocional: dar forma al caos a través del diseño. Pronto publicará un libro donde entrelaza estas experiencias vitales y profesionales con sus raíces culturales, demostrando que el verdadero lujo no está en lo que se posee, sino en lo que se crea.

He aquí algunos de los espacios, descubre más en: https://www.alfonsocobo.com/