Carlos Serra es uno de esos nombres que no hacen ruido, pero que dejan huella. Fundador de Scotta, no necesita presentaciones ampulosas ni focos estridentes: le basta una camisa bien cortada, un gesto tranquilo y la firmeza de quien cree en lo que hace. En cada prenda de Scotta hay algo suyo: la nostalgia del verano eterno, la complicidad de un padre con su hijo, el viaje en moto que no se olvida, la costumbre de cuidar los detalles.

Más que una marca, Scotta es un estilo de vida que rehúye lo impostado y celebra lo auténtico. Carlos no habla de moda, habla de valores: calidad, familia, tiempo bien vivido. Y mientras lo cuenta, uno entiende que su éxito no está en seguir tendencias, sino en mantenerse fiel a una esencia serena y elegante, como una fotografía en Super-8.

En esta entrevista, Carlos Serra nos permite asomarnos a su mundo. Un mundo hecho de algodón bien tejido, de memorias compartidas y de una mirada que siempre va un paso más allá del diseño. No se trata sólo de vestir bien: se trata de vivir con intención. Y en eso, Carlos tiene mucho que enseñar.

1. ¿Scotta nació de una idea… o de una necesidad?

Scotta nació de una mezcla muy orgánica de ambas. La idea venía rondando desde hacía tiempo: una marca que hablara de autenticidad, de disfrute, de elegancia. Pero también era una necesidad personal, de crear algo con alma, que conectara con mi forma de entender la vida.

2. ¿Qué había en tu vida justo antes de crear la marca?

Tenía necesidad de construir algo propio. Trabajaba en un entorno más corporativo, pero sentía que quería emprender algo que realmente me llenara.

3. ¿Cómo se viste alguien que sabe quién es?

Con naturalidad. No sigue tendencias. Sabe que menos es más, que el detalle importa, y que la ropa es una extensión de su actitud. La elegancia no está en el qué, sino en el cómo.

4. ¿La elegancia… se aprende o se hereda?

Diría que se intuye. Puedes tener referentes, pero la verdadera elegancia nace cuando dejas de intentar ser otro. Es una forma de moverse, de hablar, de mirar, que va más allá de la ropa.

5. ¿Qué historia cuenta una prenda cuando está bien hecha?

Cuenta una historia de respeto: por quien la lleva, por quien la hace y por el tiempo que va a durar. Lo más valioso que tienen nuestras prendas es su durabilidad y el detalle que hay detrás de cada una.

6. ¿Te inspiras más en la calle… o en el recuerdo?

En ambos. El recuerdo tiene un peso emocional especial, pero la calle también, claro: lo cotidiano tiene mucha belleza.

7. ¿Qué tiene España que no se puede coser en otro sitio?

Tiene carácter, luz. Nuestra forma de entender el tiempo, la amistad, la sobremesa… Y se nota cuando algo está hecho aquí, con manos que entienden esa esencia.

8. ¿Cómo es el verano Scotta?

Ligero, despreocupado, pero con estilo. Es un verano de amigos, de motos, de terrazas al atardecer. Tiene ese punto mediterráneo de disfrutar sin complicaciones.

9. ¿Cómo se mantiene la identidad sin caer en lo predecible?

Escuchando mucho e imitando poco. Innovar no es hacer ruido, es afinar el mensaje. Cambiar sin perder el alma, ésa es la clave.

10. ¿Qué ha sido más difícil: empezar o mantenerse?

Mantenerse. Empezar es pasión pura, pero mantenerse requiere equilibrio. Hay que saber cuándo acelerar y cuándo parar. La constancia es más difícil que el impulso.

11. ¿Qué hay detrás del logo, más allá del diseño?

Hay una identidad. Un logotipo que marcó el inicio de este viaje y con el que comenzamos a construir lo que hoy es Scotta.

12. ¿En qué momento sabes que una colección está… “lista”?

Es complicado, porque siempre surgen nuevas ideas. Pero sé que una colección está lista cuando cada prenda transmite todo lo que tenía que transmitir.

13. ¿Scotta va hacia algún lugar… o ya está donde quiere estar?

Está en movimiento, pero no tiene prisa. Queremos crecer, sí, pero con coherencia. No se trata de llegar lejos, sino de hacerlo bien.

14. Cuéntenos algún secreto de la próxima temporada

Hay colores y tejidos nuevos, y varias colaboraciones que, si todo va bien, van a traer algo muy especial…

Y aquí va un adelanto de lo de este verano…

Tendencias